24.3.18

Optimismo

Tenemos motivos para ser optimistas. Y Pinker es nuestro faro. No se lo pierda, desocupado lector. 

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ah, el ingenuo optimismo de los trasnochados ilustrados: querer suplir la cruda realidad por un modelo "racional" elaborado en un despacho. Qué progreso más guay. Lástima que trajera opresión y montañas de cadáveres.

Anónimo dijo...

La ilustración, como el progresismo, parte de una premisa: el hombre será feliz cuando su vida se asemeje a una vaca estabulada, calentita y bien alimentada. Pero el mundo real es mucho más complejo.

Anónimo dijo...

Si hay motivos para ese optimismo, ¿por qué los europeos se suicidan más, tiene más depresión y se niegan a tener hijos? Contradictorio.