21.10.14

Esas sábanas heladas...

Esos pueblos de Castilla que mueren cada año cuando llega el otoño. Ese olor leña crepitando en la lumbre. Esa bolsa de agua caliente. Ese vaho. Esas sábanas héladas. Esos ocres. Esa sabiduría rural. Ese placer de disfrutar de un día de campo...

Toda esa tristeza de otoño, que sólo Pedro García Cuartango es capaz de transmitir. 

No se la pierda, desocupado lector. 

2 comentarios:

Drizzt dijo...

Hoy, desde mi oficina, viendo la sábana de contaminación que cubre Madrid, no puedo sino dejar de pensar en esos parajes a los cuales usted describe...

Entiendo la tristeza que transmite Cuartango y la noto al visitar algunos pequeños pueblos de la Moraña, donde nacieron familiares de mi mujer.

Sabe, estimado Perdiu: Se que Madrid y las grandes ciudades es donde está el trabajo y crecieron con las grandes migraciones de los 50 y 60. Pero en el fondo, necesito escaparme cada cierto tiempo a esos pueblos pequeños y ese mundo rural.

El Perdíu dijo...

A mí me lo va usted a contar, querido lector...