25.7.10

Las generaciones...

Los niños. Lo comentaba con alguien el día que nació Elicia, hace ya más de tres años. Está naciendo la gente que, si todo va bien, nos enterrará dentro de muchos años. La gente que dirá: está mi tío muy mayor ya, o que dirá, murió el padre de tal o el abuelo de cual.

Pienso en todos los que han ido naciendo cerca de mí en estos últimos tiempos, todos los niños que, por uno u otro motivo, han significado, están significando y significarán algo (no lo dudes) a lo largo de mi vida; y pienso en qué será de ellos cuando sean ancianos y todos los que los hemos visto nacer hayamos desaparecido, cuando sea el año, yo no sé, 2068 ó 2070 y ellos sean ya mayores. ¿Qué recordarán de su infancia?, ¿Qué de sus padres, de sus abuelos, de sus tíos? Dónde andará, en ese momento el hijo de Joao, mi estimado Álvaro, que siempre que me ve me llama y me sonríe; dónde Elicia, ¿Habrá tenido hijos y nietos sanabreses o la postmodernidad habrá borrado ya este jardín premoderno que con tanto esmero estamos cultivando?, a qué habrá dedicado su vida el hijo de Mi General, y qué habrán sido sus hijos: ¿americanos, europeos, vascos, españoles? Dónde habrán acabado viviendo los dos niños de Hannah, qué recordarán de una madre que tanto los quiere aquí y ahora, lo mismo que los hijos de Bebé; o el hijo de Amelí, qué recordará de un abuelo que lo lleva por el campo; o la hija de Chisun, mi admirado Chisun, ¿qué pensará de la España del cambio de siglo, la España en la que se criaron sus padres?

Gracias a Ortega, sé desde hace muchos años que en realidad los hombre no nacemos en el vacío. Nacemos en una generación, con ella crecemos, sus valores compartimos o impugnamos y con ella morimos. Sus creencias son muy parecidas a las nuestras y el aire que respiramos, como la placenta que nos envuelve antes de nacer, está compuesta de partículas generaciones imposibles de entender cuando uno no está dentro de ella…

Por eso Dorian Gray acaba volviéndose loco.

Por eso nunca somos amigos de nuestros padres ni de nuestros hijos. Porque nuestros amigos han de compartir nuestro ethos generacional, y eso no nos puede pasar con alguien que no pertenezca a nuestra época.

Por eso, desocupado lector, y cito de nuevo al maestro Ortega, un hombre se parece más a su tiempo que a su padre..


PS: "Una generación es una variedad humana, en el sentido riguroso que dan a este término los naturalistas. Los miembros de ella vienen al mundo dotados de ciertos caracteres típicos, que les prestan fisonomía común, diferenciándolos de la generación anterior. Desde ese marco de identidad pueden ser los individuos del más diverso temple, hasta el punto de que, habiendo de vivir los unos junto a los otros, a fuer de contemporáneos, se sienten a veces como antagonistas. Pero bajo la más violenta contraposición de los pro y los anti descubre fácilmente la mirada una común filigrana. Unos y otros son hombres de su tiempo, y por mucho que se diferencien, se parecen más todavía. El reaccionario y el revolucionario del siglo XIX son mucho más afines entre sí que cualquiera de ellos con cualquiera de nosotros. Y es que, blancos o negros, pertenecen a una misma especie, y en nosotros, negros o blancos, se inicia otra distinta".

Ortega y Gasset, J: “La idea de las generaciones”, en “El tema de nuestro tiempo”, publicado en 1923.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=ic0Ga6sc9cg

El viejo castillo:

http://www.youtube.com/watch?v=TQxLko1HAtM&feature=related

Hermosa música.

http://www.youtube.com/watch?v=wgBGOTJjh-o&feature=related

Anónimo dijo...

Tengo un sobrino que enviará esto:

http://www.youtube.com/watch?v=corsWtmwVEAç

de pura sangre.

Anónimo dijo...

Yo misma estoy por la labor de lanzar el mismo mensaje:

Sangre, sudor y lágrimas:

http://www.youtube.com/watch?v=5leVQeK_3Ws&a=GxdCwVVULXeOU903-VNxdT8tnhxmMVYX

Ik heb het goed gedaan, geen gezeur nu aan mijn kop, oh... rot nu maar op.....

Anónimo dijo...

Ah Rot nu maar op...España no me ha significado más que sudor y lágrimas.

Anónimo dijo...

Hablar de Oscar Wilde no arregla el entuerto.
Aunque quizás enseñe:
"No man is rich enough to buy back his past"