15.2.08

De universidades y voces

Distinguidos lectores me han afeado, por vía particular, el uso de expresiones malsonantes en algunos post. Agradezco las críticas, aunque no comparto el fondo: la palabra escrita vinculada a la vida diaria, como es este caso, ha de ir, a veces, aderezada de algo de mala leche y de un cierto espíritu provocador que ayude a agitar la conciencia del desocupado lector.
Viene esto a cuento de que no sé bien como definir a la gentuza que el otro día se
atrevió a insultar y amenazar a María San Gil. En la Universidad, dónde si no. La mujer que decidió hacer política el día que eta mató a su amigo Gregorio Ordóñez mientras almorzaban en San Sebastián. Ves desplomarse muerta a la persona con la que conversas y ahí decides recoger su antorcha. Caben pocas noblezas mayores que esta.
Frente a ese gesto, tenemos el de unos mierdas, no puedo evitarlo, que se llaman a sí mismos
AGIR, (y que supongo que para la gentuza de la upg representan “la trayectoria democrática del nacionalismo gallego). No creen en la libertad de expresión. No creen en el respeto. Son analfabetos. Parece que la policía ha detenido a uno de ellos. Caiga el peso de la ley sobre él. Pero un favor. No les llamen fascistas, ni nazis. No. Son la extrema izquierda. Y como tal hay que llamarlos. Y tratarlos.

PS: Acepté así con naturalidad, como un hecho justificable e inevitable de la vida, que mi compañero se construyera [...] con una faceta pública de progresismo insurgente, de reivindicación de los desposeídos, mientras en lo privado se comportaba con los habituales rasgos de homófobo, misógino y hasta racista diluido que caracterizan al reaccionario civilizado. Méndez, Sabino:
Corre rocker. Crónica personal de los ochenta. Booket, Madrid, 2004. Página 92.

PD: hoy tocan los peperos en
La Casa. Presencia de lujo, la de Gustavo de Arístegui. Si puedo acercarme, mañana les cuento.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

De acuerdo, excepto en un matiz. Los hijosdeputa que intentaron agredir a María Sangil son extrema izquierda, no son fascistas, pero sí son nazis.

Nacionalistas y socialistas a la vez: imposible no ser un fanático totalitario. Lo fueron los nacionalsocialistas alemanes, lo son los nacionalsocialistas vascos, los catalanes y lo son los gallegos.

Anónimo dijo...

Perdiu, claras reflexiones las tuyas que comparto, pero no olvides que esos estudiantes de veintitantos años fueron educados por el PP. Y paradojas de la historia, es gente del PP quien paga las consecuencias.

Al respecto de los resultados sociológicos de las políticas educativas del PP en Galicia (y en Valencia y en en Cataluña), aún no he oido ningún "mea culpa" a quienes como el pp las propiciaron, las alentaron o muy concretamente como en Galicia, generaron dichas políticas educativasdurante los últimos veinte años.

Ya sabes, es bueno antes de las consecuencias políticas q analizar las causas. Causas en las que en concreto el pp no quiere entrar.

Para muestra un boton: hace no muchos días afirmaban que garantizarían la educación en castellano en toda España... hace menos días, ya aclaraban que dichas garantías se adaptarían a los territorios con dos lenguas... hace unas horas ya garantizaban en Madrid colegios de educación en catalán, gallego y vasco.

¿A cambio de qué?

Con estos amigos...

Un saludo

Pablo el herrero

Anónimo dijo...

Siempre hay que matizarle a usted, porque siempore trata de pescar en rio revuelto con sus "obsesivas obsesiones" contra los que no piensan comousted. La UPG no tiene nada que ver con ese grupo que usted cita. La UPG es una organización legal, que acata la Constitución, que no participa en elecciones, que trabaja en el marco del bNG, y que de ninguna manera realiza ningún acto contra personas o cosas, sean estas quienes sean.
Por lo demás, el BNG condenó tajante y claramente esa estúpida y despreciable agresión verbal a esa señora como condena toda clase de actos similares. Por ejemplo, la agresión al señor Bono en aquella manifestación tan vergonzosa a cargo de puros provocadores de la extrema derecha.
Debería usted ser más equilibrado, y eso lo haría mas creible. No invente maniqueamente a supuestos enimigos. loi que nos diferencia es, sobre todo, una idea política que la democracia nos permite, a usted y a nosotros, defenderla. En paz, como es lo normal y así se hace normalmente.
Usted agrede, señor, y agrede gravemente.usted no es un liberal.

Anónimo dijo...

"La UPG no tiene nada que ver con ese grupo que usted cita. La UPG es una organización legal, que acata la Constitución, que no participa en elecciones, que trabaja en el marco del bNG, y que de ninguna manera realiza ningún acto contra personas o cosas, sean estas quienes sean."

No soy el único que trata de llevarle a usted ante su verdad: usted es un fascista que miente, sencillamente, señor perdiu. Es cierto lo que le contestan?:

"Por lo demás, el BNG condenó tajante y claramente esa estúpida y despreciable agresión verbal a esa señora como condena toda clase de actos similares."

Conteste usted

Anónimo dijo...

No creo que Perdiu sea un fascista, pero sí creo que está obsesionado con todo lo que no es castellano viejo, castizo y propio. Existen otros paises en su país, amigo. Respételos. Y a los violentos, desprecielos, pero no mienta ni confunda a la gente.

Anónimo dijo...

Agir, grupo independentista gallego, preparó la intimidación y agresión que sufrió María San Gil, invitada por alumnos y profesores gallegos.
El propio decanato (me imagino que serán gallegos y no castellanos viejos, castizos y propios) ha pedido la expulsión de Agir como asociación de la Universidad de Santiago.
Este grupo ya ha amenazado a otras asociaciones de la universidad como GER (que también serán castellanos viejos, castizos y propios... se han ido todos a Galicia).
Después de prestar declaración, uno de los detenidos por la agresión e intimidación explicitaba la motivación de su reunión matutina: que determinadas personas se enterasen de que no pueden pisar Galicia y que si lo hacen se atengan a las consecuencias.
Ante esto, cualquier persona sensata, de cualquier país dentro de otro país que tiene un país dentro, coincidiría en el análisis y no recurriría a términos tan irrelevantes para el caso que nos ocupa como fascista o obsesivas obsesiones.

La cuestión no es salvar el buen nombre de la minoría minoritaria independentista de Galicia, sino condenar a grupos violentos que pretenden marcar quién puede entrar y quién no en una facultad gallega.

Algunos andan más preocupados en lo primero que en lo segundo.

Anónimo dijo...

Efectivamente, pero este del blog insulta a organizaciones que no sólo no insultan a la gente sino que gobiernan sin queja su propio país (cita UPG). Hay minorías independentistas y hay corrientes sociales de ese orden, pero no todas vana a hacer esas cosas. Lo peor de todo es confundir a la gente.